En este viaje, nuestro objetivo era llegar lo antes posible a Alsacia, para disfrutar con calma de las carreteras y pueblos de esta región francesa y de la Selva Negra Alemana.

Salimos temprano de nuestra querida tierrina y teníamos claro cual seria nuestro primer destino, haríamos noche en la Duna del Pilat, en la costa francesa.

Yo había visitado esta enorme duna durante un viaje familiar hace años, y quería que Mateo la viera en directo, me encantó verle la cara cuando llegamos, porque la duna impresiona.

Es la duna más alta de Europa (2.9 KM de largo; 616m de ancho y hasta 110m de alto, ya que siempre está en movimiento), se encuentra a 70km al sur-oeste de Burdeos, en la provincia de La Gironda. Durante milenios, la naturaleza ha creado esta extraordinaria duna, y con los años se ha convertido en uno de los espacios naturales más visitados de Francia.

¿Qué hace tan especial a la Duna du Pilat?

Creo que lo que hace que la Duna du Pilat tenga una magia especial es su inmensidad, para comprenderlo tienes que “escalarla” (hay escaleras de madera en diferentes puntos de la duna), una vez llegas arriba lo entiendes, parece que estás en un desierto inmenso con vistas al mar, suena bien ¿verdad?